FORT LAUDERDALE, Fla. — Según la Unidad de Corrupción Pública de la Oficina del Sheriff de Broward, el agente Michael Spencer fue detenido poco antes de la 1 de la madrugada durante su turno en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale/Hollywood.
Spencer se enfrenta a un cargo de hurto mayor y de comisión de un delito grave de tercer grado con un arma.
Siguiendo una información no revelada, los detectives de la PCU de la BSO llevaron a cabo una operación encubierta de control de integridad en el aeropuerto.
El 24 de agosto, un agente de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos que colaboró en la operación, se hizo pasar por un viajero que encontró un bolso marrón desatendido en el aeropuerto.
El agente encubierto de la ATF entregó el bolso, que contenía 1,664 dólares en efectivo, a Spencer mientras estaba de servicio, de uniforme y sentado en su vehículo marcado de la BSO.
El bolso también contenía múltiples objetos de señuelo para dar la apariencia de que un viajero lo había perdido.
Los detectives de la BSO dijeron que Spencer no hizo ningún intento durante el resto de su turno, que terminó a las 5 de la mañana del jueves 25 de agosto, de entregar el bolso y su contenido. En su lugar, dijeron que se quedó con el efectivo y se deshizo del bolso y su contenido.
Los investigadores dijeron que Spencer se presentó en el trabajo el jueves por la noche, pero siguió sin entregar el dinero. Por ello, fue detenido el viernes aproximadamente a las 12:50 de la mañana.
La investigación reveló que Spencer gastó unos 200 dólares del dinero.
Los detectives dicen que han recuperado los 1.476 dólares restantes de los fondos de la investigación dentro del vehículo asignado a Spencer por la BSO.
Unas horas más tarde, Spencer se presentó ante un juez de Broward que encontró causa probable para los cargos.
El abogado de Spencer dijo al juez que no tenía dinero para una fianza de 1,000 dólares, y aunque el abogado que representaba al estado argumentó que se le debía conceder una fianza de todos modos, el juez acabó liberándolo sin ella.
Mientras estaba en la corte, el juez dijo: “Sr. Spencer voy a ponerle en libertad provisional. No debe tener ningún arma de fuego ni munición en su poder. Asegúrese de que sigue y cumple todas las condiciones de la prisión preventiva, de lo contrario podrá quedar sin fianza. ¿De acuerdo? Buena suerte, señor”.
“La seguridad pública es una profesión honorable y requiere que las personas sirvan con los más altos estándares éticos. Seguiremos vigilando, haciendo que los empleados rindan cuentas de sus actos y deteniéndolos cuando participen en actividades ilegales”, dijo el sheriff Gregory Tony.
Spencer trabaja en la BSO desde diciembre de 2001.
Tras la detención del viernes, fue suspendido sin sueldo.
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